La revista Nature ha publicado un artículo sobre el trabajo que ha venido realizando Google en los últimos años en torno a la computación cuántica, plasmado en el chip Sycamore.
La computación clásica es la que marca el ritmo de la tecnología desde hace años, y está presente en nuestros ordenadores, teléfonos móviles, televisores y demás dispositivos.
La computación cuántica se basa en las propiedades de la mecánica cuántica, ofreciendo la posibilidad de crear ordenadores que sean capaces de resolver problemas que serían demasiado difíciles para los clásicos, y por tanto les tomaría más tiempo, o directamente que imposibles de resolver.
A efectos prácticos, esto podría permitir crear mejores baterías, descubrir qué moléculas pueden producir medicamentos efectivos o minimizar las emisiones de la creación de fertilizantes, así como potenciar tecnologías avanzadas actuales, como el machine learning.
Sycamore, el chip de cuántico desarrollado por Google, realizó en 200 segundos un cálculo que al ordenador más rápido del mundo le habría llevado 10.000 años.
Los de Mountain View están trabajando con otros investigadores para poner en práctica esta tecnología. Además, han publicado herramientas de código abierto para que cualquiera pueda colaborar.
Más información en el blog oficial de Google.