Tal y como estaba previsto, Samsung ha aprovechado el evento Galaxy Unpacked para presentar oficialmente su nueva serie Galaxy S25, compuesta por los modelos Galaxy S25, Galaxy S25+ y Galaxy S25 Ultra.
La compañía ha enfocado esta generación en revolucionar la experiencia de usuario mediante la integración de inteligencia artificial avanzada y algunas mejoras en hardware.
Los terminales cuentan con pantallas AMOLED de 6,2 pulgadas (en el caso del modelo base) y 6,9 pulgadas (si hablamos del S25+ y el Ultra), con una tasa de refresco variable hasta 120Hz.
En su interior nos encontramos con el Snapdragon 8 Elite Mobile Platform for Galaxy, un procesador exclusivo que promete un salto de rendimiento significativo respecto al Galaxy S24. Con mejoras del 40% en la unidad de procesamiento neuronal (NPU), 37% en CPU y 30% en GPU, estos dispositivos están diseñados para manejar tareas de inteligencia artificial directamente en el dispositivo, eliminando la dependencia de la nube y garantizando una mayor velocidad y privacidad.
Además, el procesador incorpora tecnologías como el ProScaler, que mejora un 40% la calidad de las imágenes en pantalla, y una cámara de vapor un 40% más grande, que optimiza la disipación de calor para un rendimiento sostenido.
Lo acompañan 12GB de memoria RAM, hasta 1TB de memoria de almacenamiento y una batería de hasta 5.000 mAh en el caso del modelo Ultra, mientras que el S25+ se queda en 4.900 mAh y el base en 4.000 mAh.
En lo que respecta a la conectividad, destaca el soporte para las tecnologías inalámbricas Wi-Fi 7 y Bluetooth 5.4, además del 5G y LTE, claro.
Samsung ha apostado por una integración profunda de la inteligencia artificial en su capa One UI 7, que ahora ofrece agentes multimodales capaces de interpretar texto, voz, imágenes y videos de manera contextual. Estas capacidades permiten realizar búsquedas intuitivas, como encontrar fotos en la galería mediante comandos de lenguaje natural, y realizar tareas avanzadas como editar videos con la nueva funcionalidad Generative Edit.
El motor de datos personales (Personal Data Engine) analiza información localmente para proporcionar experiencias personalizadas sin comprometer la privacidad. A esto se suma la adopción de criptografía post-cuántica, que protege los datos contra futuras amenazas tecnológicas.
En cuanto a fotografía, el Galaxy S25 Ultra destaca con una configuración de cámara avanzada que incluye un sensor ultra ancho de 50 MP y una cámara principal de 200 MP, capaz de capturar detalles excepcionales incluso en condiciones de baja luz. La grabación HDR de 10 bits, ahora por defecto, ofrece una expresión de color cuatro veces más rica que el formato de 8 bits.
Nuevas herramientas como Audio Eraser permiten eliminar ruidos no deseados de los videos, y Virtual Aperture ofrece control sobre la profundidad de campo para una experiencia fotográfica más cercana a las cámaras DSLR.
La serie adopta materiales reciclados, como aluminio y cobalto, y presenta un diseño refinado con bordes redondeados y mayor resistencia gracias al nuevo Corning Gorilla Armor 2. Además, los dispositivos cuentan con certificación IP68 y están respaldados por siete años de actualizaciones de sistema operativo y seguridad, prolongando su vida útil.
La nueva familia de teléfonos de Samsung se pondrá a la venta el próximo 4 de febrero. El Galaxy S25 partirá desde los 909€, el Galaxy S25+ desde 1.159€ y el Galaxy S25 Ultra desde 1.459€.