Otra de las aplicaciones gratuitas que tiene Razer para mejorar la experiencia de juego en PC (que no todo van a ser periféricos), es Game Booster.
Su finalidad es tan básica como útil, hará por nosotros el trabajo sucio de cerrar aplicaciones y procesos mientras estemos jugando, de forma que, teniendo un sistema más optimizado consigamos obtener una mayor tasa de frames por segundo, lo que afecta directamente en la fluidez de los juegos y por tanto en la experiencia general. Tras dejar de jugar, estas aplicaciones y procesos se volverán a iniciar, siguiendo exactamente donde se quedaron.
El trabajo «gordo» lo hará automáticamente, pero si queremos ir un poco más allá podemos hacerlo configurando otra serie de ajustes individuales que también tienen su peso a la hora de lo bien o mal que nos puede ir un juego en nuestro ordenador, contando con su propio desfragmentador de disco.
Otra de sus características es la de buscarnos automáticamente las actualizaciones de los controladores del hardware que tengamos instalado, para que, en la medida de lo posible, nosotros solo nos tengamos que encargar de jugar.
Es compatible con Windows XP, Vista, 7, 8 y 8.1. Como decíamos más arriba, es gratuito, por lo que por probarlo no perdemos nada, y quizás nos llevemos una agradable sorpresa.