Microsoft empezó su conferencia del E3 2016 con hardware vía Xbox One S y lo ha terminado de la misma forma con la confirmación de Project Scorpio, el paso adelante de los de Redmond en cuanto a hardware consolero se refiere.

Tal y como apuntaban los rumores que os hemos venido contando en las últimas semanas, esta nueva consola será bastante más potente que la Xbox One original.

En concreto estamos hablando de una GPU con una capacidad de procesamiento de 6 teraflops y un ancho de banda de la memoria de 320GB/s que hará que los juegos sean compatibles con resoluciones 4K y esté preparada para soportar headsets de realidad virtual.

Con respecto a esto último, eso si, no han mencionado directamente a Oculus Rift, que era lo que apuntaba la información filtrada, no sabemos si porque no lo han creído conveniente ahora o porque no solo se podrá usar con ese headset y se podrá hacer con cualquiera, incluido HTC Vive. Habrá que esperar.

Project Scorpio se lanzará a finales de 2017, por lo que estamos todavía a un año y medio de ver este nuevo hardware en las tiendas. Eso si, todos los juegos que se lancen serán compatibles con las tres consolas, lo que nos lleva a pensar que, para que los juegos saquen partido a Project Scorpio, estos traerán configuraciones diferentes según la consola en que se ejecute.