Tal y como estaba previsto, Google ha presentado el primer teléfono fabricado por ellos mismos, el Google Pixel, más allá de las colaboraciones pasadas con Samsung, Motorola, HTC o LG, entre otras.
El teléfono está fabricado sobre un cuerpo unibody de aluminio y cristal pulido, con una pantalla AMOLED y en su interior un procesador Snapdragon 821 Quad Core a 2.15GHz dos de sus núcleos y 1.6Ghz los otros dos.
La pantalla del modelo normal es de 5 pulgadas y con una resolución de 1080p, mientras que el Pixel XL es de 5.5 pulgadas y su resolución Quad HD.
Tiene 4GB de memoria RAM LPDDR4, una batería de 2.770 mAh en el modelo normal o de 3.450 mAh en el XL. Tiene un sistema de carga rápida que le da unas 7 horas de uso con solo 15 minutos conectado a la corriente.
En cuanto a conectividad: Bluetooth 4.2, USB Type-C y jack 3.5mm para auriculares. Además, claro, sensor de huellas dactilares en la parte posterior del terminal, justo debajo de la cámara.
Google Pixel es el primer teléfono en incluir de serie el nuevo asistente virtual de la compañía que presentaron en la pasada Google I/O.
Su cámara principal es de 12.3 megapíxeles con apertura f/2.0 y 1.55um. Los poseedores de un Google Pixel tendrán almacenamiento ilimitado de sus fotos en máxima resolución en Google Fotos. Para el resto de mortales, recordemos, la versión gratuita del servicio reduce la calidad de fotos y vídeos a 16 megapíxeles y 1080p, respectivamente.
Estará disponible a partir de 759€ el modelo normal de 32GB y desde 869€ el Pixel XL de 32GB en tres colores: negro, blanco y un azul exclusivo de Estados Unidos. El Pixel XL de 128GB se va a los 1009€. Ya se puede reservar.
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